miércoles, 22 de agosto de 2012

Mazamitla: Adiós Yote


Muy a mi pesar os tengo que comentar una triste noticia: Yote ya no va a estar más con nosotros, os explico; el viernes pasado decidimos irnos de fin de semana nada más y nada menos que a uno de los conocidos como pueblos mágicos. En un principio toda nuestra intención era pasar 2 noches en Tapalpa, pero debido a que una vez en los carros nos desviamos del camino correcto, decidimos ir a otro pueblo mágico llamado Mazamitla (para mí siempre será Matilda porque no lo consigo decir bien). En el camino amenizado por canciones salsonas y algún que otro bailoteo pudimos disfrutar de las hermosas vistas del gran lago Chapala, enorme y precioso, os lo prometo, nunca vi nada ni medio parecido, rodeado de montañas enormes y todo tremendamente verde, también a nuestro paso pudimos cruzar 2 pueblitos a orillas del lago que tenían un encanto verdaderamente particular.  Ya llegando a nuestro destino, debíamos buscar cabañas (no cabañas típicas de madera a lo cutre, no, sino casitas estupendas con sus jardines bien cuidados y sus magníficas vistas), y al final encontramos la nuestra, donde podríamos dejar a los dos perros que llevábamos y pernoctar Hugo, Sara, Dani, Josa, Vachy, Iván, Beto y Yo.
 Una vez asentados en nuestras humilde morada, bajamos al pueblo donde acabamos empapados en busca de bebida y comida para pasar una noche estupenda y un desayuno mejor. Cenamos en sitio de la plaza del pueblo unos tacos variados (barbacoa, chorizo y adobo) y alguna quesadilla y de ahí nos fuimos a casita con unos buenos paquetes de leña para encender nuestra chimenea.

La noche sin más fue espectacular, nos lo pasamos muy padre tomando y jugando a diversos juegos (cartas y demás), y cuando nuestros cuerpines no alcanzaban a dar más de sí, llegó la hora de dormir. Dormimos juntas Sara, Vachy y yo,  hacía tanto frío que nos metimos con forro polar, pañuelos y 8 mil mantas en la cama, pero a medida que pasaba la noche fue todo lo contrario ¡jodo qué calor!  Aquí en México pretenden volvernos locos, o te asas o te hielas.
A las 11 de la mañana amanecimos, y Sara, Hugo y yo nos pusimos a cocinar unas tortillas y huevos revueltos para desayunar con una buena salsita picante acompañada con un jugo de mango delicioso ¡Sabor!
A las 12:30 movilizamos a todos para hacer una caminata por la montaña, y la insistencia que tuvimos las mujeres en ir hacia allá, sin duda nos traicionó, digamos que acabamos reventadas subiendo las pLutas cuestas de la montaña, agotaditas acabamos, la resaca salió a la luz con retardo y no tuvimos más remedio que descansar en un llanito en medio del bosque mientras los perritos correteaban incansables. 

Una vez el descanso había acabado, pedimos “ride” y unos chavos nos bajaron en su “pick up” (o como quiera que se diga) a Hugo, Sara, Vachy, a los perritos y a mí, sin duda toda una experiencia que no podíamos dejar pasar. 

Ya en el pueblo, recorrimos las callecitas y puestos y comimos unas gorditas de frijoles con queso, chorizo y demás cosas buenas.
Cuando el resto de los chicos llegaron al pueblo (a pie, claro está), recargamos provisiones y compramos para preparar un deliciosa barbacoa a la mexicana. Sin duda, no decepcionó, los chefs Beto y Josa, nos instruyeron en el arte de los asados y no veáis lo bonitas y coloridas que son acá las parrillas.

 Entre chelas y comida el tiempo fue pasando y la noche llegó; hoy tocaba pasar la noche en la planta de arriba, también con chimenea, entonces subimos todos menos los perros. Un rato más tarde y cuando nos quisimos dar cuenta, Yote ya no estaba en el jardín, solo estaba el otro perrillo. Yote se fue, lo buscamos por todas partes pero no apareció y al día siguiente después de hacer una batida por el pueblito y preguntar a algunas personas nos dimos por vencidos, Yote se quedó en Mazamitla, tenía la oportunidad de vivir con nosotros como un rey, pero sin duda prefirió el pueblo y las montañas en lugar de la ciudad, quizás yo, sinceramente, hubiera hecho lo mismo. Esperamos y deseamos que nuestro pequeño Yote crezca sano por allá y quién sabe si algún día en estos meses nos le encontramos, vive en un pueblo mágico y… ¡Todo puede ser posible!


Por último no me gustaría despedirme sin hacer un guiño a mi “brothermana” Vachy que ayer cumplió 22 añitos. No todo el mundo tiene la suerte de celebrar su cumpleaños en México. Ayer la pobreta estaba un poquito malita, pero no hubo mucho problema, celebramos una cenita con algunos españolitos y los roomies en nuestra casa; pedimos pizza al domino’s y como tardó más de lo normal… nos salió gratis, luego cantamos el cumpleaños feliz en 3 lenguas y finalmente disfrutamos una deliciosa tarta de queso con zarzamora ¡Delicioso! El fin de semana si nuestros cuerpos se recuperan y/o no enferman volveremos a celebrarlo ya en modo party total.

¡¡Pongamos cara a casi toda mi gran familia!!

Ya después de aguantar esta parrafada me despido hasta nuevo aviso, donde os comentaré como fue mi experiencia universitaria acá.


Un beso enorme guapuras.



viernes, 17 de agosto de 2012

Nuevo amigo: Yote

Hola a todos/as!
Estoy muy pero que muy feliz. Cuando me dijeron de venir a otro país, y México en concreto, me propuse disfrutar todo lo que hiciera, conocer a personas sin importar la nacionalidad, empaparme de las experiencias vividas cada minuto y hacer cosas buenas.  Y lo que me propuse poquito a poquito se está cumpliendo, disfrutar estoy disfrutando (he eliminado las siestas de mi vida), conocer ya conozco a personas de todas partes (también españoles) y en cuanto a las experiencias y cosas buenas, está siendo una pasada.

     


Uno de mis propósitos desde que era pequeña fue tener un perrito y no hay mejor manera que adoptando a un perrito de la calle.

La historia de nuestro amigo Yote comenzó antes de ayer. Íbamos paseando por la Avenida Juarez, Hugo, Vachy, el alemán Eric y yo de camino a la casa de Sara a tomar unas chelas, pero cuando íbamos caminando de repente un perrito joven, no más de 4-5meses, nos adelantó, y a la que pasaba dijimos ¡Anda!¡Parece un coyote!, parecía un zorrillo y comenzamos a silbarle y llamarle, y comenzó a seguirnos todo el largo camino hasta casa de Sara, unos 20 minutos y ya le teníamos tumbado plácidamente con nosotros. Decidimos llamarle Yote, y le dimos agua, pavo y alguna salchicha, pues estaba muertito de hambre. Para más inconvenientes, empezó a llover muchísimo y claro, no podíamos dejarle a la intemperie, así que agarramos un taxi y metimos a Yote dentro. Una vez en casita, empezó el debate con nuestros roomies para ver qué hacíamos con él. Le dimos de comer y agüita y llamamos al casero Damian para avisarle. Yote está en casita hasta nueva orden, le estamos cuidando y desparasitando, ayer le bañamos y quitamos garrapatas y pulguitas a mano (sí, yo, Alba la escrupulosa, ha perdido todo el escrúpulo que me quedaba), y ahora le tenemos a dieta de arroz porque está malito de la tripa.


En serio, no os podéis imaginar lo bonito y bueno que es, ayer cuando nos íbamos a la universidad, dejamos a Yote en el jardincito de la entrada, se quedó medio llorando e intentando salir, pues bien, cuando íbamos caminando a agarrar el taxi a unos 200 metros de nuestra casa, ¿Quién apareció corriendo hasta nosotros?, pues sí, Yote, que se creía que le abandonábamos. Le llevamos a casita y le metimos en el patio interior. 

Después estuvimos en la bienvenida a la universidad, y como no podía ser menos, nos recibieron con un grupo de 8/9 mariachis. Nos pidieron que cantáramos, y os podéis imaginar quienes cantamos, los españoles claro está, y el resto de guiris nos hacían los coros. En fin... así funciona México =), después, nos agruparon por nacionalidades para pedirnos unos documentos y luego nos invitaron a tacos. De vuelta rápido a casa porque estábamos deseando ver a Yote, ¡qué majo! nos recibió feliz de la vida y nosotros claro está encantados también.




No sabemos qué pasará, pero de momento... tenemos un nuevo amigo y acá ha sido nuestro gran descubrimiento.


miércoles, 15 de agosto de 2012

Sábado, domingo y lunes, a cual mejor.


Tengo que comentaros que la vida en GDL es de lo más chingona. La gente si bien nos ha recibido con los brazos abiertos, nosotros no podíamos llegar de otra forma, sería... ¿cómo explicarlo?, sería de pendejos no más. 

El sábado pasado estuvimos en una fiesta a la que nos invitó Carmen, una chica española que ya hoy regresó para España. Allí estuvimos hasta tarde tomando algunos improvisados cócteles de lo más suculentos; los que más triunfaron son los que incluían kiwi licuado, una delicatesen, yo no dejaría de probarlo, que los kiwis en España solo son conocidos por sus efectos “José Coronado” o ahorita “Carmen Machi” y creerme que sirven para más. 

Pero todo llega  su fin, y si la bebida se acaba y los establecimientos dejan de vender alcohol a cierta hora, pues acá se va a “La Penca” un hipermercado  a más de 30 minutos del centro de Guadalajara a recargar provisiones donde va todo el mundo. Fuimos en el escarabajito de Beto, de copi Vachy, y luego atrás Kyle y yo, la ida sin sobresaltos, pero a la vuelta hicimos la de la empujada, el coche no arrancaba y un buen hombre nos tuvo que ayudar.
 Una vez de regreso, bailes (salsa, merengue y un infiltrado single de “Vaca-Pollo” interpretado por Sara) hicieron el resto  para terminar la genial velada de Carmen.

El domingo, después de dormir sin límite de hora, ya que nadie ni nada nos esperaba, decidimos irnos al centro de la ciudad donde había un festival y tocaban varios grupos. Después de hacer una especie de merienda de chelas (cervecitas) en casa de Carmen, ya nos fuimos al festival. Una vez en la cola para entrar, escuchamos los gritos de “¡Damas y niños por aquí!”, y claro nosotras obedientes a la poli allí fuimos. A las damas registro de bolsos, pero a los pobres hombres… una cola interminable para que los policía uno  a uno y contra la pared les cacheen como criminales, en serio, acojonaba bastante. Luego el concierto estuvo padre pero como casi todas las tardes y con más razón del huracán/tormenta tropical, empezó el diluvio universal y claro… tocó desalojar.

El lunes, ya estábamos pendientes de la llegada de Hugo, era por la tarde/noche pero ya teníamos ganas de que llegara, así que por la mañana no hicimos más que platicar con los geniales de nuestros roomies; es cierto, somos un grupo variopinto pero está muy pero que muy bien.  A medio día llegó otro alemán a la casa, un nuevo güerito (extranjero) que se llama Eric, y por la tarde nos fuimos a pasear hasta el supermercado para acompañarle y de paso comprar unos pimientos y comida que necesitábamos. Como ese día había que esperar a Huguito, no íbamos a salir, así que invitamos a tomar algo a casa a unos amigos mexicanos Beto y Buba,  a Sara y a otros compis españoles Iván y Dani. Como ya era la hora, las tripas empezaban a rugir con fuerza y por fin Hugo había ya llegado, entre cerveza y cerveza cocinamos una tortilla española. Para corrobora que nos había quedado simplemente deliciosa, pedimos al chef Manuel Salcido (un similar a Arguiñano pero de acá) que hiciera la cata, y para disfrute propio y también de nuestros huéspedes nos la aprobó y dijo que estaba muy rica. Después acabamos platicando  de todo un poco en nuestro porche particular, ¿y sabéis que? me dijeron los mexicanos que parecía una tapatía (gente de Guadalajara), cosa que me hizo ilusión aunque en realidad fuera un vacile más de los que se traen, pero orgullosa estoy de por un segundo haberme sentido tapatía, sí sí, una breve pero gran experiencia con la que poder irme a dormir.

Y bueno, hoy han pasado algunas cosas bastante interesantes, pero como todavía no puedo confirmar las totales buenas noticias… mejor lo dejo para la próxima jugosa entrada.

domingo, 12 de agosto de 2012

Chapulines, mariachis y riesgo!!

Lo prometido es deuda y aquí está el Catsup que no ketchup del McDonalds

También tengo alguna novedad que comentar de la experiencia acá. La primera podría ser que ayer decidimos Vachy y yo hacer la compra, y podríais decir UUUaaauuu qué interesante!!! Pues no interesante, sino el mayor coñazo de la historia. Si ya es chungo saber que es lo que quieres comprar en España, imaginaros lo que viene a ser decidirse entre mil tipos de comida y marcas que no conoces. Pues bien, estuvimos una hora y media como poco recorriendo a cámara lenta todos los pasillos, uno por uno, pero al final hicimos una buena comprita y bastante completa. De vuelta de comprar agarramos un taxi (ya lo digo así porque en 4 días no hago más que meter la pata) y el buen hombre taxista nos confundió con venezolanas por el acento - A saber qué acento!- llegamos después de perderle unas 20 veces y descargamos todas las bolsas, ¡por fin!

Otra novedad fue que por la tarde-noche nos fuimos hacia las afueras de la ciudad hacia una zona que se llama Tlaquepaque, para ir agarramos un "confortable" camión y una vez allí paseamos tranquilamente por sus calles, y la verdad que tiene encanto, sí sí, como dice nuestro colega Kyle, todo es "muy nice".

Paramos en un localcito para probar el Pulque, que es una especie de cóctel hecho con tequila y diferentes sabores, y nos lanzamos a la temida aventura de probar una orden de chapulines (saltamontes), la verdad es que no me entusiasmaron demasiado, sabían como a pipas tijuana, con lima y con picante... una sensación rara, mejor no pensar lo que se está comiendo, pero al final prueba superada!!

También allí, decidimos ir a un lugar en que hacían buena pizza de leña, y cenamos pizza alemana, no es mexicana el nombre pero los ingredientes y el amor de los chef era de lo más mexicano. Vinieron al final de la cena unos chicos mexicanos amigos y novio de la españolita Carmen y nos llevaron a la placita donde nos tomamos otro cóctel, llamado cazuela (tequila, fruta variada y más amor mexicano) escuchando a 3 o 4 grupos de mariachis sin parar de tocar ni un momento.
 De ahí se decidió, jugar al qué apostamos, ¿Qué apostamos a que no cabemos 10 personas en un coche?, sí, así fue, unos encima de otros y maletero fueron las solución para poder ir todos juntos. Pero eso no es lo más fuerte, lo genial fue la adrenalina de ir circulando al lado de la policía y el miedo a ser deportadas al 4º día de estar aquí, flipante, las españolas cagadas literalmente y los mexicanos tan tranquilos, otra experiencia más.
Fue un día bastante largo pero cuando llegamos Vachy, Kyle y yo a casita, al poco llegaron el resto de roomies, los alemanes y Paul, así que acabamos escuchando musiquita y hablando un remix de idiomas de los más chingón.
¿Os podéis creer que entienden mejor el castellano mexicano que nuestro perfecto castizo? Qué indignación!! Además hoy todos los mexicanos están con el ego subido, han ganado a Brasil  y si ya  no hacen más que tocar el claxon de los coches para todo... imaginar hoy!


Otro día más y mejor!!


jueves, 9 de agosto de 2012

CHIDO!!!!


Muuuuy buenas queridos/as!!
Después de dos noches en el hostal, ya esta mañana nos despedimos del recepcionista, nos grabó para hacer un montaje de no sé qué, nos tomó una foto para el muro de la fama y por último hicimos el check-out para marchar a la que será nuestra casa esta temporada. 

Las primeras horas de vida de día en Guadalajara las dedicamos a buscar alojamiento, y eso sí, nos pateamos kilómetros y kilómetros bajo un sol asfixiante (no voy a ponerme morena, voy a coger un tono camionero de lo más chido). Entre tanto caminar y marearnos con tanta casa se nos fue abriendo el apetito y paramos a tomar algo de comer y de beber en una tiendita pequeña, probamos las "burritas de barbacoa" y el agua de sabores (agua de sabor de fresa o limón que toman para comer aquí) y una vez recuperamos energía seguimos caminando. Después me hice con una SIM mexicana para llamar aquí y fuimos a visitar las 2 casas que nos faltaban por ver, la última de ellas es la que triunfó y en la que ya estamos acopladas. Un rato más tarde "agarramos" que no "cogimos" un camión (autobús) donde parecía que ibas trotando en un caballo de lo viejos que son y de los jodidos socabones que no agujeros que tiene el asfalto, pero lo importante es que llegamos para reposar en el hostal. De cena fuimos a por unas hamburguesas al McDonalds, y... ¿cómo se llama el payaso acá? No se llama Ronald, sino Oswaldo, muuuuy fuerte.Y eso no es todo, el ketchup sabe distinto pero lo peor no es eso, sino que se pronuncia y escribe de la misma manera "catsup", tengo pruebas de ello que ya os mostraré. 

Hoy el día también ha sido intenso. He amanecido llena de picaduras de mosquito, pero lo peor es que me había echado mil de repelente antes de dormir, es decir, que los pLutos mosquitos mexicanos se ríen de los repelentes y de mí en particular en mi cara, así que... poco puedo hacer para remediarlo. Después de una duchita y el desayuno, recogimos todas nuestras cosas (maletas y macutos) y nos fuimos a casa de Damian, nuestro casero, tomamos un taxi hasta nuestra nueva casa y visitamos nuestras superhabitaciones. Son enormes, tengo una cama de matrimonio pero cabrían cuatro o cinco más sin exagerar nada de nada. A la hora de comer fuimos Kyle (un compañero de casa de EEUU), Damian (el casero australiano), Manuel (compañero de casa mexicano y chef famoso de tv), Vachy y yo a un restaurante de "comida corrida", que viene a ser comida casera del día, donde comes hasta hartarte y no llega a 4 euros. La comida diferente, muy picante y en cantidades industriales pero ha estado muy gracioso, nos hemos reído muchísimo la verdad. Después vinimos a casa, hicimos sobremesa con un poco de tequila del bueno -nada que ver con el de España- y luego deshice la maleta.  Por la tarde quedamos una mezcla de españoles con mexicanos y Kyle en un bar para tomar unas cervezas y unas alitas de pollos con salsas de todo tipo que te las clasifican en la carta por niveles de picante. Hay 10 niveles, pues solo os digo que han pedido un nivel 5 y he sido incapaz de pegar más de un mordisquito, me ardía todo el cuerpo, exagerado, no me puedo imaginar los niveles mayores pero ya digo, tampoco me atreveré a probarlos.

Y ahora... pues ya en casita, hemos conocido a otros 2 compañeros de casa alemanes que están estudiando sus master aquí y no entienden ni papa de español (por lo menos inglés hablan) y ya un pelín de coloquio en Vachy's room y a dormir que mañana por la mañana vamos a hacer un recorrido por la ciudad en formato turistas y claro tenemos que descansar pues el día será muy largo y tenemos bastantes cosas programadas y otras tantas en proyecto. 

Y de momento muy buena onda y hasta aquí puedo leer... 




miércoles, 8 de agosto de 2012

ACÁ por fin!!

Qué pasa chavos/as!!

Acá me encuentro por fin. 
He sacado un poquito de tiempo para contaros que llegué con éxito a Guadalajara, que estoy bien sana y que me alimento lo mejor que puedo dentro de lo poco que hemos podido optar a comer.

La experiencia de un viaje tan sumamente largo para mí (pues mis trayectos rara vez superan la hora y pico de duración  en los internacionales trayectos Madrid-Bercial o Madrid-Sepúlveda) fue buena a ratos pero muy pero que muy cansada. En Barajas mismo conocimos a una chava muy maja que nos dio sus referencias para cualquier cosa que necesitáramos en GDL, seguidamente vinieron las tristes despedidas (fui fuerte fuerte para no llorar) y después control de seguridad y a coger nuestros asientos. El vuelo Atlanta-Madrid fue bastante cómico, hubo momentos para todo, películas, juegos (partida emocionante de trivial), musiquita y derivados, todo ello con una constante corriente de bebida y comida (jodidos peanuts) que nos hacía más agradable el vuelo en las 3 primeras horas, pero que a partir de la cuarta hora nos hizo sospechar que pretendían cebarnos con fines comerciales, menos mal que no nos tocó bussines porque hubiera sido excesivo. Lo único "malo" es que mientras los más fresas (pijines) se atiborraban de langosta a nosotros solo nos repartieron las toallitas de limón, que la gente para mi sorpresa empezó a restregarse por lugares inhóspitos de sus esculturales cuerpos -no daré más detalles-.
Una vez el vuelo acabó, recogimos los excedentes de comida para posteriores emergencias al igual que una mantita para posibles momentos en los que refrescara y seguidito nos fuimos al control de pasaportes. En un primer momento pensamos "miedo... a ver qué nos dicen", pero un vez ahí nos toco al poli más majo de todo EEUU que nos dio un palique de entre 15 y 20 minutos, menuda conversación intensa tuvimos, después un controlcillo más con una poli (de 2x2 metros de embergORdura) y hacia la puerta de embarque del vuelo Atlanta-GDL. Ahí conocimos a otra chica que coincidencias de la vida era amiga de la chava de Barajas, que como no podía ser diferente (todo el mundo es superamable la verdad) también nos prestó su ayuda. En este 2º vuelo las cosas fueron diferentes, Vachy y yo no íbamos juntas y lo que es peor me tocó al lado un hombre mexicano que durante tres horas no hacía otra cosa que platicar conmigo sobre cosas no muy agradables de la vida acá cuando yo lo único que quería era dormir, eso sí, acabó dándonos también sus referencias y presentándome a media familia suya en pleno vuelo; lo único gracioso que saqué de aquella experiencia con el hombre es que me estuve descoYonando media hora de como llamaba a las azafatas, su nombre oficial para el hombretaño era "Aeromozas", ¿cómo se quedan? yo muerta todavía me hallo. 
Cuando llegamos a tierras mexicanas, pasamos controles, nos requeteolisqueó un perrucho y nos tocó pulsar el botón, ¿y qué es el botón?, pues es una especie de ruleta rusa, si te toca verde respiras tranquila y muestras tu bella sonrisa, si te toca rojo te cagas en la pLuta y te registran todo el equipaje. Nosotras por suerte tuvimos lucecita verde y pudimos ir a agarrar un taxi. Una vez en el taxi el diluvio universal, mil de rayos, gotas del tamaño de kiwis, granizo, piscinas que no balsas de agua y un crazy-driver manejando el taxi a toda leche saltándose semáforos y hablando por el celular, definitivamente pasamos miedo, pero... llegamos al hostal ya de noche, tarde y descompuestas por lo que las aventuras durante el día serán el asunto de la próxima entrada, ah!! y quizás mañana os puedo decir que ya tengo casa!! 

continuará...






lunes, 6 de agosto de 2012

MEXICO allá voy...

¿Maleta lista?

Tengo que admitir que en estos 3-4 últimos días me he empezado a encontrar un pelín inquieta, que no nerviosa, porque con lo despistada que soy para algunas cosas, la misión maleta (en mi caso MALETÓN) no ha sido una tarea sencilla. Como no quería que se me olvidara nada de nada y tengo que ser meticulosa a la hora de hacer ciertas cosas, me he ayudado de no uno, sino de dos blocs de notas. En uno de ellos cosas que hacer antes de meter nada en la maleta y cosas que dejar hechas antes de partir -hay que seguir un riguroso orden de TOC-, y en el otro bloc, una larga lista de objetos variopintos separados en sus correspondientes categorías, como pueden ser, aseo, botiquín (ese apartado que en mi vida abarca bastante debido a mi gran delicadeza), ropa de abrigo, cosas varias (donde incluyo tuvo de snorkel e imperdibles), ropa suave, seguido de un semi-largo etcétera.
El siguiente paso después de efectuar la larga lista, ha sido el de sacar todas esas cosas (a medida que pongo TICs al lado del objeto) y  amontonarlas en algún lugar a la espera del "Tetris" final; ese lugar, ha sido la habitación de Mario, la cual ha quedado totalmente invadida por innumerables montoncitos.
Una vez he conseguido que Mario's Room parezca una tienda de Bershka y/o Blanco en primera semana de rebajas, comienzo a tachar los TICs y a guardar las cosas en la maleta y después de tan duro esfuerzo y tantear lo que pesa en una báscula de baño de hace más de 2 décadas, creo que cumple el peso y por fin LISTA para partir!!!



En unas horas estaré volando rumbo México. A las 11:00am para ser más precisa desaparezco del mapa español, pero en el "Mundi", así que todavía me podéis localizar, pues admito visitas encantada.


Hasta pronto bellos/as!!!!


miércoles, 1 de agosto de 2012

Después de 5 intensas noches en Bercial...


BERCIAL 2012 

Después de unos intensos 5 días con sus intensas 5 noches por tierras segovianas, tengo que comentar que he sobrevivido sin apenas percances. Este año no ha habido visita al "médico cejudo" de guardia, ni articulaciones fuera de su lugar, digamos, que después de fiestas todo sigue en su sitio y por ello ORGULLOSA 100%.
Si he tardado en volver a escribir es porque he estado dando una tregua a mi cerebrito que después de los excesos que le he hecho pasar se merecía unas gustosas vacaciones, al igual que el estómago que de tanto hielo y algún virus también ha terminado por sufrir un pirrinín.


Las fiestas de Bercial prometían y claro, este año no podían ser menos, me lo he pasado como una enana, bailes todas las noches y hasta la madrugada al ritmo de una charanga, una discomovil, una orquesta, una orquestucha penosa (con tio transvestido en tacones con los mismísimos Eggs al aire), la orquesta de la 2ª noche y otra discomovil, han hecho que cada día levantarse fuera un pelin más duro para nuestros "bodies" pues hasta los pasodobles y coplas han estado al nivel del temaTo que no temaZo "Quítate el top".


Como ya he dicho, levantarse era difícil pero si era para comer en panda un rico Pollo al Ajillo o una buena Paellada en compañía de medio pueblo todo valía. Lo que no era tan apetecible era limpiar la guarrería que quedaba en nuestra chocita de obra reconvertida en peña, ha habido que raspar todos los días pues por la noche o bien surtidos manjares o pizzas variadas eran nuestras deliciosas cenas en aquel cuchitril. 
Ah!! Pero eso sí, hemos estrenado unos vistosos ajuares!!!



Lo mejorcito de las fiestas sin duda alguna:
¿Somos una peña?
 ¡¡¡Somos una piña!!!!

Y ya por último me queda por comentar que en el pueblito me he tenido despedir hasta dentro de 6 meses de parte de mi family y de mi hermanito Mario que aunque no se lo crea demasiado le voy a echar mucho de menos.


Y bueno... la aventura con Mijita continúa... SOLO 5 DÍAS para partir!!!!